Angry and disrespectful

I’m often criticized by so-called allies or people from my own collectives.

I’ve been told that it’s egotistical to suggest that trans women should be paid when they provide their personal data for psychology theses or any kind of study about them. Apparently it’s immoral to have autonomy over your data and get paid when letting others use it with your consent, while nobody complains when our data is being taken from us without our consent. The analogy with the body is impossible to ignore.

I’ve been told that it’s good that we trans folks have to pay to access surgery and HRT. I was pointing out that even if the treatments themselves are free, the medical consultations and the blood tests are not, which hinders access to those treatments and healthcare in general. I was then insulted repeatedly and told that we should be grateful that the two most expensive things are covered, so we should pay happily for the other, mandatory charges. I said that this worries me for those who cannot afford the costs. The reply was that I was making it a personal issue, not a collective one.

Some of these people who insulted me were trans men. They were not confronted by someone who works in a division for diversity at the government of Mendoza province, Gabriela Echenique, who let them bully me, kept telling me that the Human Rights issue I was complaining about was a personal issue of mine, and agreed that it was OK that everyone had to pay. She said that the law doesn’t mention those costs, even though I clearly explained how one thing (surgery, HRT) is UNATTAINABLE without the other (consultation, tests). So if the law guarantees surgery and hormones, it must be interpreted that the law is implicitly making it mandatory for everything in between to be also accessible. She, allegedly a lawyer, disagreed. She also proposed working on a project for inclusion of transgender people at a regional university, but when I mentioned the importance of using an intersectional approach, specially concerning disability (most trans folks are neurodivergent or have some kind of disability), she brushed it off immediately. She will not address disability from the start, although every trans friend of mine who has studied there is disabled. Too personal, I guess.

Other supposed ‘friends’ are other autistic people who believe that intolerance should be tolerated. They believe it’s OK if someone disagrees with you and votes for someone who explicitly wants you and them dead. I know that I can’t change their minds, but I can’t help feeling bad about them wanting to have their own disability rights taken away from them and other autistic people, together with every other disabled person. I never told them I had any affinity for any political party (which I don’t), I simply stated that some ideologies should not be respected. Again, several people disagreed. Apparently, all ideologies, including Nazism and all forms of fascism, have to be respected. I wonder if they include plain old eugenics in their list of deeply respected ideologies.

Cis women, trans men, autistic people, and many others who I wished would be my safe circles, my trusted ones, or — if we happen to form a deep connection — my accomplices, are more often than not my unexpected enemies. They make me feel threatened when I have just retreated from dangerous places.

I feel extremely lonely and sad when I face these situations. I’m writing this because I know that I have true accomplices out there. Not everyone is here right now, but I know that our connection is bound to happen, or to continue, at some point in our lives. To all of you, I send you lots of love and compassion. I hope that we can all find understanding and be free of hatred and bullying. I hope that one day we will no longer be ridiculed for saying uncomfortable but necessary words. Let’s keep fighting for everything, for all kinds of intersectionality, regardless of how they make us look — like angry, violent protestors, like obnoxious, disrespectful people who are never satisfied. It’s time for the hateful to feel uncomfortable. Let’s disrespect their hate. Let’s be those angry rebels. Let’s be all of that and more. Let’s be each other’s hope.

Gaslighting

Una de las ideas más peligrosas contra las personas trans es la contradicción de que se puede difundir el odio hacia las personas trans y al mismo tiempo negar que esto está sucediendo. Es difícil matar a alguien frente a una cámara, difundir la filmación por redes y decir «no le maté», pero es muy fácil decir todo tipo de ideas transodiantes y luego decir «no odio a las personas trans, solo hablo de los hechos». Esta impunidad está relacionada con la falta de educación sobre sexualidad, género y biología, y con la fuerte tendencia que tiene el odio de rellenar todos los huecos del conocimiento.

Se suma a esto el uso de descalificaciones, como las acusaciones de que las personas trans usamos un «razonamiento emocional» o las especulaciones sobre la inteligencia de una persona trans, pasando por alto el hecho de que nadie ha podido dar una definición clara de la idea de «inteligencia» hasta el día de hoy y, por supuesto, nadie explica cómo midieron esa inteligencia cuando la juzgan.

Para terminar, quien odia necesita disfrazar su fealdad de alguna manera, para lo cual es indispensable maquillar sus ataques como defensa de otro grupo. Lo que falla es que nunca podrán defender a las mujeres, a les niñes ni a las personas autistas, porque todos estos grupos se intersectan entre sí y con el de las personas trans. Odiar a las personas trans es odiar a mujeres, a niñes y a autistas. Es odiar a niñas trans autistas. Soy autista y es insultante que usen parte de mi identidad para diseminar el odio hacia mí y hacia mis compañeres. Sí, me han hecho enojar tanto que ya no me preocupa decirlo, no me preocupa que no me crean o no me entiendan.

También me han hecho llorar. ¿Cómo puedo estar delatando mi debilidad? ¿Si me hacen llorar acaso no perdí la discusión? Lloro por la humanidad. Porque el daño es real. Porque las mentiras son la peor parte. El gaslighting es la peor parte. A veces me pregunto si mi tranquilidad, mis momentos de felicidad, son solo engaños. Quizá la calma es una mentira, ¿cómo puedo pretender sentirme segure en un planeta en llamas y lleno de personas que me odian, se burlan de mí y se justifican autopremiándose como activistas o defensores de otras personas a quienes no defienden? Para que les crean sus cuentos es necesario que seamos les enemigues, y allí comienza la nueva contradicción, la de decir que no están en nuestra contra pero están en nuestra contra porque creen que les hacemos daño a otras personas, que siempre son cis. La víctima siempre es cis para que el discurso funcione.

El razonamiento emocional es el de le transodiante, porque nos quiere débiles, sumises, confundides. No busca comunicar, educar ni descubrir, sino causar sufrimiento. Quieren deprimirnos con su odio y esconder su estrategia con la vieja descalificación ¡misógina! de lo emocional. ¿No había que defender a las mujeres? Hay que dejar morir a esa absurda dicotomía de razón y emoción, como a todas las otras. Hay que sospechar más de quien razona y menos de quien siente. Durante siglos pusimos a les primeres en un pedestal, a les últimes en silencio. El planeta está en llamas. Sigamos vives, porque esa es su derrota.

 

 

 

Quisiera hacerlo público pero no puedo

Opino que una forma de protestar contra una violencia es hacerla pública. No puedo saber si es la mejor forma, si siempre es necesaria, o si es eficiente o siquiera efectiva. Pero sé que mantener las violencias en el ámbito privado jamás le sirvió de nada a nadie, excepto a quienes violentan, ya sean seres humanos o sus instituciones.

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Nota a RENAPER de 2020 exigiendo la eliminación del campo «sexo» del DNI argentino

Hago pública mi nota al Registro Nacional de las Personas (RENAPER), en la que solicité la eliminación del campo «sexo» del Documento Nacional de Identidad (DNI) en 2020. El motivo es visibilizar la evidencia de que el Decreto presidencial N°476/21 (que incorpora la nomenclatura «X» en los DNI) no solo se hizo sin consulta ni debate con personas nobinarias y/u organizaciones en nuestra representación, sino en contra de nuestros intereses expresos.

 

Original en PDF: Nota al RENAPER

 

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